10 jun 2010

80 años de preparación

Para sacar a Israel de Egipto, Dios necesitaba a un hombre con dos condiciones básicas, que conociera el Reino de Egipto como su casa y conociera el desierto como la palma de su mano.
Él prepara nuestra vida de tal manera que seamos la persona perfecta para la misón que él ha determinado.
Dios se tomó 80 años para preparar a un solo hombre que cambiaría la historia de un pueblo entero.
Incluyendo esos presuntos fracasos, como quizás le parecieron esos fatigosos 40 años a Moisés olvidado en el desierto después de ser un hombre poderoso en el Imperio más grande de la época .
Veamos nuestros desiertos como trampolín y no como una sepultura.
Veamos nuestros desiertos como una fuerza de oportunidades y no como una fuerza hostil.
Reconciliémonos con nuestro pasado, pues Dios puede sacarle un significado increíble a través de los ojos de la Fe.