Aire, Tierra o Agua

Las aves nacieron para volar, las serpientes para moverse a raz de piso y los peces para nadar en las aguas.
Pero el hombre nació con la posibilidad de decidir.
Podemos vivir siempre debajo del promedio, mirando la vida a raz de piso, desde nuestros fracasos, arrastrándonos y culpando a terceras personas del polvo que comemos.
Podemos vivir sumidos en las aguas turbulentas de las circunstancias, dejándonos mover por las corrientes que nos empujan de un lugar a otro, mirando la luz sólo debajo de toda una inmensa capa de problemas.

Pero, también podemos ser hombres que vivamos en las alturas, degustando el logro de hacer lo que amamos, buscando siempre nuevos desafíos, animando a otros a extender las alas de sus talentos y capacidades y arriésgandonos juntos en este camino por conquistar el horizonte.
El Padre puede determinar tu futuro, pero tú lo elijes.