Dios no es un Parachoque

De los 12 seguidores de Jesús, la tradición dice que 10 mueren de manera brutal y violenta, entregando su vida como mártires. Creo que es un buen momento para seguir mirando el cielo, pero con los pies bien puestos en la tierra.

Recuerdo cuando la muerte de un pastor de las asambleas de Dios, hace unos 10 años atrás. Un hombre que se transformó en un referente en la ciudad. Su muerte fue trágica y dolorosa, luego de caerse del techo de su casa, y después de agonizar 3 días fallece. Recuerdo que en su funeral, habían algunas señoras que decían: -No puede ser que Dios permita que un siervo suyo muera de esa manera... algo debió tener este hombre-

Ayer me enteré de la lamentable partida de un predicador muy respetado en el ambiente cristiano evangélico de occidente, y pensé, la manera en que partió el gran David Wilkerson, me demuestra una vez más, que ser un hombre de Dios no significa andar con una suerte de seguros contra accidentes. En medio de tantas teologías baratas donde reducimos a Dios a una suerte de parachoque celestial, recuerdo las palabras de otro Grande, J.Wesley: "Señor, si he de sufrir que sufra, pero nunca permitas que me aparte de tí".